Hace unas horas un amigo me reenvió un video sobre el rol de la arquitectura en este mundo tan contaminado, en el que la actividad humana ha causado tantos estragos. La persona que originalmente se lo envió, acompañó el vínculo con un mensaje contra los medios capitalistas que incitaban al consumismo salvaje.
Uno de los aspectos consumistas que más se critica en este país son las ansias de tener un carro. Curiosamente, quienes lo critican, son los primeros que tienen hasta dos y tres carros para una misma casa de familia. El caso es que, en este país, las cosas funcionan como para que esto sea estrictamente necesario.
El transporte público en Venezuela es deficiente. Nadie lo puede discutir. No se da abasto para toda la gente que tiene que trasladarse y ni siquiera funciona las 24 horas del día. Peor aún, durante las horas en que opera, no lo hace como debiera.
En primer lugar, hay zonas de la ciudad a las que éste ni siquiera llega. En segundo lugar, donde sí está presente, lo está con completa anarquía.
El único municipio en que los transportistas temen no detenerse en las paradas, ir en canales indebidos o atravesarse en las vías es Chacao (podría decirse que también en Baruta) Allí, ellos saben que serán multados si no cumplen con estas normas que garantizan la no obstrucción del tráfico. En el resto de la ciudad, van como mejor les provoca y nadie les dice nada.
El único servicio de transporte público de Caracas que sé que funciona las 24 horas es la línea de transporte que va de San Martín a Petare. Básicamente cubre las avenidas San Martín, Casanova, Solano y Francisco de Miranda. Sólo cuatro de las MILES de avenidas que tiene la ciudad. El Metro funciona desde las 5:30 de la mañana hasta las 11:00 de la noche. Cabe acotar que a muchas zonas de la ciudad sólo es posible llegar en Metro. Ejemplo: a mi apartamento. Sé de lo que estoy hablando con todas las bases.
Ningún miembro de la familia que convive conmigo tiene carro. De las tres personas, dos trabajamos. Yo, además, estudio. Mi vida depende completamente del Metro porque, además, los taxis son costosos y toda una aventura peligrosa. Ya sabemos que está de moda que roben el taxi o que el mismo taxista te drogue, te viole, te robe y te mate.
Mi trabajo, además, me exige que llegue a mi casa a altas horas de la noche. A veces también me exige que salga antes de las 5 am. Pero me es imposible hacer estas cosas en transporte público. No es muy alocado pensar que a millones de personas les pudiera suceder lo mismo cuando la única línea de transporte que trabaja las 24 horas del día sólo cubre cinco avenidas de Caracas.
Entonces, ante este panorama, ¿es un horror consumista que mi vida gire en torno a tener un carro?, ¿no deberían las instituciones pertinentes garantizar un servicio de transporte público que funcionara tan bien que la gente prefiriera usarlo en vez de sacar su carro?
Me pregunto, como antesala a mi próximo texto, ¿qué se supone que debe hacer la gente sin carro que trabaja hasta después de las 11 pm o la que debe salir de su casa antes de las 5:30 am y no tiene para pagarse un taxi?
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2 comentarios:
renunciar :)
Arrechísimo :) digno de un link ;) jajaja. Si, ¿cómo no se van a vender 300 mil carros al año si es prácticamente el único modo seguro y confiable de viajar en Venezuela?
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